Estas navidades hemos tenido la suerte de pasar fin de año en Italia, concretamente en una casa rural en Cortona, un pueblecito diminuto de la provincia de la Toscana.
La casa se llama Nonno Fernando, es una típica finca rural con todo tipo de comodidades, un amplio terreno con diferentes zonas para descansar, un porche, una piscina, porterias de futbol…. y todo lo que te puedas imaginar. Los dueños viven en una casita justo al lado y son una familia encantadora.
Tiene espacio para alojar a más de 23 personas en habitaciones dobles y triples (nosotros eramos 23 y cabíamos jeje)

El pueblo al que pertenece la casa, Cornona, no tiene nada de especial, salvo un Coop, un Carrefour italiano con todo lo necesario para aprovisionar la casa, lo bueno es que está entre Siena y Florencia y con un coche puedes hacer una excursión de un día, comer y volver a cualquiera de estas dos maravillosas ciudades. 
En Siena es obligatorio visitar la catedral y la plaza y dar un paseo por sus calles estrechas.
En Florencia hay mucho más que ver, pero si vas a pasar el día no te puedes perder, la Catedral, el puente Vecchio, Galería Uffizi  y el David, aunque la cola es taaaaan tremenda que igual pierdes allí el día entero.

Por la zona también tienes otros pueblos muy interesantes, San Gimignano, Peruia….
Sin ninguna duda es un viaje recomendable 100%, podéis volar a Florencia o a Roma, nosotros llegamos a Roma y aprovechamos para pasar allí un día, luego son 200 km en coche, un paseito!
Feliz Finde!