¿Os acordáis de la verbena que montamos en la boda de Yane y Raul? Montamos puestecitos para todos los gustos, una pastelería, una floristería, otro para las chuches, una bombonería…. no faltó detalle!
Pues dandole una segunda vuelta a aquella pedazo de boda, nos hemos sumergido en el mundo de las caravanas y hemos pensado, ¿por qué no restaurar una caravana abandonada y hacer algo así?

¿Os imaginais vuestra boda en una jardín y una de estas caravanas al fondo sirviendo helados o chuches? Nosotras sí y estamos convencidas de que muy pronto será nuestra!