Dicen que las mejores cosas en la vida no son cosas, que algunas no tienen precio, que otras se sienten solo cerrando los ojos y la mayoría de ellas, aparecen cuando menos las buscamos.
Una de las mejores cosas de nuestro trabajo es la posibilidad de vivir experiencias geniales, de esas que una normalmente ve en fotos y siente una envidia (sana) tremenda.
Hace unas semanas nos invitaron a uno de estos regalos que una recibe de vez en cuando y que recordamos con un cariño infinito.
Jorge Vazquez ofrecía una cena en la residencia del embajador de Francia para presentar la colección primavera-verano 2016 que fue, sin duda, de lo mas especial. Por los tejidos ,por las formas, por los trajes de chaqueta desenfadados, por el concepto romántico, sus colores menta, burdeos o blanco roto…Y en cuanto a estampados, estaban los más top, los cuadros vichy, las flores y las rayas marineras. Que decir, por ultimo, de sus sombreros… Un sueño.
Una cena de las que a todos nos gustan, de las de disfrutar. Con mesas alargadas, velas de Jo Malone, arboles entre los platos y una iluminación exquisita, si, estábamos literalmente dentro de un cuento.
Una colección inspirada en la estética de la Cuba colonial fusionada con la tradición más española. «Reinterpreta así el chic español, algo bohemio, hasta sofisticarlo con una colección urbana pero llena de color, estampados y materiales nobles»
Por si no fuera suficiente, muchos de los diseños llevaban bordados insectos, flores o plumas que recreaban a la perfección el preciosismo de la época, combinando así vestidos de fiesta vaporosos con vestidos de noche delicados en tonos oscuros, espaldas abiertas y escotes cerrados.
Para esta puesta en escena contaron con Kerastase, de la mano del genial equipo de Tacha, creando los looks de las modelos con su linea de Styling alta costura; peinaron y prepararon la piel de las chicas que desfilaban con los diseños, creando looks desenfadados que contrastaban, potenciaban y daban una fuerza tremenda a la feminidad que el diseñador quería transmitir.
Para el pelo, ondas surferas y desenfadadas; abiertas y voluminosas para dar ese look casual y salvaje sin perder la esencia del glamour más puro y limpio.
Para el maquillaje escogieron tonos ocres y dorados para los ojos pómulos marcados y piel muy limpia y natural. Acompañado por las cremas de CARITA para que la piel de las modelos luzca radiante y espectacular.
Por la mañana fuimos al centro de belleza Tacha beauty, el cual no conocíamos y que es un autentico paraíso. Nos hicieron un tratamiento de cara que, para que nos entendamos, nos dejo la piel mas que reluciente, brillante pero no grasa… una gozada vamos. Ademas nos peinaron para ir bien guapas a la cena y desfile. El centro es como un oasis de relajación absoluto, para cuando una quiere, necesita, o puede permitirse un capricho, ¿cuando mejor que en los preparativos de tu boda?
Pudimos estar presentes en el back stage gracias a kerastase, que fue quien nos invito. Viendo los preparativos de las modelos, las pruebas de vestuario y enamorándonos de todos y cada uno de los modelos que iban a lucir, de verdad, de todos.
Nos unimos a la copa de bienvenida para disfrutar, con música jazz de fondo a la que siguió el desfile y la posterior cena. Un placer absoluto, para todos los sentidos.
Nosotras iríamos ahora a una boda vestidas con este traje de chaqueta de cuadritos vichy y con el sombrero de paja,o a cualquier evento que se precie; y esto, por quedarnos con uno hoy, mañana quizá, seria cualquier otro, cada uno tiene algo especial, cada uno nos enamoro por algo.
Gracias infinitas por invitarnos a una experiencia sin duda, inolvidable. Y enhorabuena a Jorge Vazquez por crear piezas, una vez más, para soñar.
